Sobre el grupo de obras del proyecto
Temporal
En Temporal, proyecto desarrollado alrededor de 2007, abrí nuevas posibilidades a mi trabajo, recombinando los átomos de mis obras en cruces y encuentros temporarios, provisorios, haciendo aparecer formas y estructuras que permanecieron ocultas, señalando múltiples caminos, del mismo modo que la palabra temporal lo hace.
Temporal manifiesta las preocupaciones que rondan mi trabajo desde el comienzo: la fricción entre la aceleración del mundo y la morosidad de la producción pictórica, el aplanamiento de la historia y su disponibilidad, el cambio del discurrir narrativo a la percepción horizontal de la temporalidad. La disparatada aceleración a la que es sometida nuestra percepción visual.
Busco señalar de qué modo la pintura, su producción, pero también su percepción y observación, produce una cuña temporal, una ampliación de la percepción del tiempo y por lo tanto un aumento de su disponibilidad.
Aparecen entonces pinturas de pequeño formato (Pierdo el tiempo y Cosas auto-organizadas) y de gran tamaño (Detiene los giros de mi mente).
Como fórmulas mágicas o matemáticas para pensar el tiempo, la obra presenta una estructura de gran cohesión interna, que inhibe y restringe al máximo la variación a fin de mantenerse siempre igual a sí misma. Despojando cada escenario de sus determinaciones concretas, muestra la geometría, el mundo de leyes o ecuaciones que los subyace.